10 poderosas razones para hacer tu leche vegetal casera…hacia el Residuo Cero (Zero Waste)
- Calidad nutricional: en crudo se mantienen vivas las enzimas y vitaminas termosensibles que desaparecen con la pasteurización o el proceso de UHT que la industria emplea para aumentar la durabilidad del producto. Las enzimas son moléculas proteicas que favorecen las reacciones bioquímicas de nuestro organismo.
- Digestibilidad: el activado o remojo de las semillas inicia el proceso de germinación, eliminando antinutrientes y favoreciendo la digestibilidad y asimilación de nutrientes.
- Rapidez: batir y filtrar; lo dicho, tardas más en ir a la tienda a comprarla.
- Facilidad: con utensilios y técnicas cotidianas.
- Creatividad: puedes crear infinitas versiones según tus gustos, cambiando los ingredientes base, diferentes endulzantes y añadiendo especias o hierbas (cúrcuma, canela, cardamomo, ralladura de limón, anís, hinojo…).
- Endulzantes de calidad: con azúcares naturales y no refinados (si lees las etiquetas de lo que compras sabrás a qué me refiero…y si no las lees, empieza a hacerlo hoy mismo y verás que para la industria alimentaria el azúcar es como Dios, está en todas partes).
- Mayor control de los ingredientes: puedes elegir ingredientes ecológicos y de proximidad o saber de dónde viene.
- Sostenibilidad: evitas el residuo de tetrabriks altamente contaminantes para el planeta. Además, la pulpa sobrante es fibra prebiótica, buena para la microbiota porque alimenta las bacterias buenas, y con la que puedes hacer harinas, postres, salsas o compostaje.
- Más económicas: la mayoría de leches vegetales envasadas suelen tener agua y azúcar refinado como ingredientes principales…por ello su precio es más elevado en cuanto a calidad e impacto ambiental.
- Ideal para alérgicos: Los lácteos suelen ser difíciles de digerir, pueden dar alergias y también muchos problemas de salud en casos de hiperpermeabilidad intestinal. Si por el contrario tienes alergia a algún fruto seco, sustitúyelo por alguna semilla o cereal.
Cómo hacer leche vegetal supernutritiva en 5 minutos…hacia el Residuo Cero
Hacer tu leche vegetal en casa es fácil y rápido (haz la prueba, tardas más en ir a la tienda y comprarla). Los tetrabriks son altamente contaminantes, pues contienen plástico y aluminio. Si haces tu leche vegetal, evitas que un montón de residuos se sigan acumulando en nuestro planeta. Y además de estar deliciosa, es un alimento alcalinizante y lleno de energía vital. Compra siempre que te sea posible a granel, y mejor aún alimentos ecológicos y de proximidad.
Ingredientes:
- 100 gr. de almendra (u otro fruto seco o semilla).
- 1 l de agua
- Endulzante (opcional): para mi gusto así está perfecta, no obstante si quieres añadírselo te recomiendo el endulzante natural más saludable y menos procesado: la fruta seca como pasas, dátiles, etc.
Utensilios:
- Bol
- Colador
- Batidora
- Bolsa para filtrar
- Jarra o botella para servir
Procedimiento en 3 pasos:
- Activa la almendra (es decir, deja en remojo una noche (8 horas), cuela y enjuaga al día siguiente)
- Bate con el agua y el endulzante elegido
- Filtra…y disfruta 🙂
Con la pulpa sobrante puedes hacer muuuchas cosas. Aquí algunas ideas:
- Secarla en una deshidratadora o en un horno a temperatura baja (que no se tueste) y luego molerla en un molinillo. Y…ya tienes una harina para repostería.
- Añadirla como fibra a algún paté vegetal
- Mezclarla con sirope de ágave y ralladura de naranja y hacer unas bolitas de «mazapán»
- Utilizarla como ingrediente en alguna ensalada…
- Congelarla y utilizarla más adelante
- Y también usarla para hacer compost… en cualquier caso si decides tirarla, es materia orgánica que alimenta a la tierra y algunos bichitos se pondrán muy contentos de tener alimento de calidad 😉
COMMENTS ARE OFF THIS POST